Jose Alfredo Castillo, goleador innato

September 9, 2021

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Bolivia nunca se ha caracterizado por ser un país exportador de futbolistas, sin embargo los pocos jugadores que han podido emigrar a otras ligas casi siempre han dejado un buen recuerdo, un buen nombre y las puertas abiertas para que más jugadores bolivianos puedan seguir su camino. Es el caso de José Alfredo Castillo quien actualmente vive la etapa final de su carrera, la carrera que soñó de niño y que sigue dejando a punta de goles su nombre escrito en la historia del fútbol boliviano.

Todo comenzó a sus ocho años, “Comencé por unos compañeros de colegio que me incentivaron a que vaya a probarme a la Tahuichi, fui con varios de ellos a probar suerte y gracias a Dios el técnico que era de la categoría de 8-9 años, Román Sánchez me vio y me becó” para ese momento su sueño era uno y lo tenía muy claro, quería jugar para Oriente Petrolero en el Ramón Tahuichi Aguilera.

“Mi camino por la Tahuichi fue como la de todo niño, disfrutando de poder jugar y entrenar, después viajar mucho, eso me dio mucha experiencia y cuando me llegó la oportunidad de debutar en primera llegué sin ningún problema, sin ningún miedo” recuerda el delantero sus primeros pasos en la academia donde destacó y mostró su capacidad en las distintas ediciones del Mundialito Paz y Unidad.

El momento de su debut llegó a nivel profesional con la camiseta que siempre anheló, la de Oriente Petrolero, Milton Melgar fue quien dispuso que tuviera sus primeros minutos en la entonces Liga ante Wilstermann en Cochabamba. Aunque el arco tardó en abrirse un par de meses para el delantero su gol llegó en agosto del 2020, “El primer gol lo hice a Guabirá, ese partido lo ganamos 2 a 0”.

La siguiente temporada fue de ensueño ya que logró marcar 42 goles y la Federación Internacional de Historia y Estadística de la FIFA lo premió como el máximo Goleador Mundial de Primera División, a ese logro personal se suma el título conseguido con Oriente Petrolero, el penúltimo conseguidos por el club albiverde en las últimas décadas.

Fue entonces cuando Tecos de México decide ficharlo, “mi salida a México se da por los goles que hice en 2001 y en el 2002 el primer semestre venía siendo goleador del campeonato eso me ayudó a emigrar” cuenta el goleador, esta primera temporada en el fútbol mexicano fue buena y le permitió seguir mostrando su talento y calidad a nivel internacional, “Me recibieron muy bien con mucha expectativa, en México mi primer semestre fue espectacular, fui goleador del equipo, estuve contento porque se cumplieron las expectativas. Era un sueño jugar en el estadio Azteca, eso fue lo más impresionante y lo más bonito que he vivido” relata Castillo.

En 2004 se da su regreso al fútbol boliviano, “Mi paso por Bolívar fue en 2004 yo venía a préstamo del club Tecos a préstamo por 6 meses para jugar la Copa Libertadores y gracias a Dios me fui muy bien, ese torneo salí campeón, lo más conmemorativo fueron los 3 goles que le hice a Boca Juniors” sin duda el triplete que marcó a Boca en Siles es un momento muy recordado por los hinchas académicos.

Al final de ese semestre Castillo volvió a Tecos, pero el club mexicano determinó volver a cederlo a préstamo, esta vez al fútbol argentino, a Rosario Central. Posteriormente retorna nuevamente a Oriente Petrolero para seguir agrandando su carrera de goleador histórico con el club refinero. Pero sus goles le continuaron abriendo puertas a nivel internacional.

El siguiente destino fue Chile, O’Higgins donde también le regaló algunas alegrías a los hinchas chilenos. Siempre codiciado por el club Bolívar retorna al país en 2008 pero su permanencia en Bolivia duró poco ya que ese mismo año cuando el Atlético Mineiro celebraba 100 años de historia decide fichar al boliviano “Es un orgullo para mí, estoy feliz y realizando un sueño” declaraba a la prensa brasileña el goleador al momento de su llegada al vecino país.

Tras este gran logro de llevar sus goles al fútbol brasileño donde también se encontraba en un gran momento Marcelo Martins se da un nuevo retorno al país, primero a Oriente Petrolero y luego cruza la vereda para ser el atacante de Blooming. Esa temporada 2010 vuelve a superar las decenas de goles con 26 tantos en 44 partidos. Y cuando parecía que su carrera continuaría en Bolivia, se abre nuevamente la posibilidad de retornar al fútbol mexicano.

Su primera experiencia en Tecos había tenido un gran inicio pero la falta de experiencia a nivel personal hicieron que estuviera envuelto en algunos problemas que mermaron su capacidad dentro de la cancha, es por eso que esta segunda oportunidad era un estilo de revancha, de hecho el delantero al momento de fichaje mencionó lo siguiente a la prensa mexicana, “Ahora tengo una familia, tengo tres niños, entonces, eso aún más me fortaleció para estar más maduro, y más que todo revertir todo lo malo que había pasado”.

Sin embargo los goles no lo acompañaron y retornó al país para agrandar sus récords, su nombre y demostrar su talento en los distintos clubes de su natal Santa Cruz con un pequeño retorno al Club Bolívar donde sufrió una lesión. Fue entonces que retorna a su casa Oriente Petrolero en la temporada 2012/13 y marca 5 goles, pasa a Guabirá donde recupera sus números y anotó 17 goles en la Liga, pasa a Sport Boys de Warnes donde tiene 10 goles en la temporada.

Vuelve a Oriente donde suma 5 goles, la siguiente temporada es fichado nuevamente por Guabirá y con 13 goles pasa a ser refuerzo de Sport Boys para jugar la primera Copa Libertadores del equipo warneño. En los últimos cinco años volvió a vestir la camiseta del club azucarero donde hizo 34 goles en dos temporadas y decide retornar a la que siempre fue su casa Oriente donde permanece en la actualidad.

Es así que lleva 22 temporadas en el fútbol profesional, centenares de goles marcados en torneos nacionales e internacionales. También ha vestido la camiseta de la Selección en contadas ocasiones y solo tiene un sueño pendiente en su carrera que lastimosamente no podrá cumplir, “es no haber podido ir a jugar a Europa, tuve 3 posibilidades y lastimosamente no se me dio, pero tranquilo por todo lo que pasé, agradecido con Dios por todo lo que me dio” explica.

Castillo hace una mirada para atrás en su carrera y afirma: “A mis inicios lo único que hubiera querido era ser mejor goleador de lo que fui”. Ahora complementa su carrera en Oriente donde busca volver a poner al equipo refinero en un torneo internacional, con sus estudios para ser director técnico, su idea es seguir ligado al fútbol luego de cerrar su carrera para lo cual aún no tiene fecha.

Sin embargo con su vasta experiencia sabe que el fútbol boliviano debe cambiar, “tiene que cambiar desde la base, la dirigencia tiene que comenzar a construir campos deportivos, contratar buenos entrenadores, lo más importante es que la dirigencia ponga los cimientos. Vamos más de 30 años pidiendo ese cambio y hasta el momento no se ha hecho, la materia prima está, los jugadores estamos, cada vez hay más futbolistas, lo único que nos falta es que la dirigencia ponga de su parte, invierta muchos recursos en planificación, que copien todo lo bueno que han hecho los países vecinos con su infraestructura y divisiones inferiores, ahí está el éxito para cada país”.

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