RECORDANDO AL ÚLTIMO ROMÁNTICO

June 20, 2017

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Los años siguen pasando, pero la pelota no deja de extrañar a Juan Román Riquelme, uno de los jugadores que mejor la trataba. Su magia ya no es más que un recuerdo, y con cada día que pasa crece la sensación de que nunca volverá a haber otro como él.

  1. Adiós. En enero del 2015 tras conseguir el ascenso a Primera con Argentinos Juniors –el club que lo formó– decidió dejar el fútbol. Dos años después, y a pesar, de que varios clubes de todas partes del mundo –incluido San José de Oruro– lo tentaron para que vuelva, se mantiene firme en su decisión.
  2. Barrio. Creció en Don Torcuato, un barrio ubicado al noroeste de Buenos Aires. Allí, en los populares potreros, fue desarrollando su talento hasta captar la atención de varios ojeadores.
  3. Colegio. Poco después de terminar la primaria, tomó la decisión de dejar sus estudios para concentrarse de lleno en perseguir su sueño: jugar al fútbol. Le costó trabajo convencer a su madre, María Ana, pero su padre, Cacho, lo apoyó plenamente.
  4. Descubridor. Jorge Rodríguez tiene un rol protagónico en su carrera. Cuando aún jugaba en su equipo de barrio, les habló a sus padres para llevarlo a su club, en Bella Vista. Después, lo llevó a probar suerte a algunos clubes de la capital, hasta que quedó en Argentinos Juniors.
  5. Explosión. Tras el retiro de Diego Armando Maradona, en 1997, estaba llamado a ser el nuevo líder futbolístico de Boca Juniors, club en el que había debutado poco más de un año atrás. Tras un semestre de adaptación, lo consiguió.
  6. Festejo. En abril del 2001, nada más y nada menos que en un Superclásico argentino, patentó uno de los festejos más emblemáticos de los últimos tiempos: El Topo Gigio. ¿En qué consiste? En ponerse las manos detrás de las orejas, como para escuchar mejor.
  7. Gen. Antes de recalar en las inferiores de Boca fue tentado por River. Sin embargo, al ser fanático del conjunto Xeneize, desestimó la oferta, a pesar de que, económicamente, era muy importante. “Toda mi familia ha sido siempre de Boca” –confesó años después–, “y a mi representante le dije que, aunque sea por la mitad de plata, tenía que vestir esa camiseta”.
  8. Humilde. Forma parte de una familia numerosa: es el mayor de 11 hermanos. Y a lo largo de su infancia, en su casa no sobraba nada. “A mis viejos los admiro –contó en una entrevista–, no sé cómo hicieron para criar a tantos chicos en tiempos de miseria. Y siempre con una sonrisa, enseñándoles lo bueno y lo malo de la vida, y el valor del esfuerzo, el trabajo y la honestidad”.
  9. Implacable. Durante su infancia las altas exigencias de su padre –que fue su técnico en Don Torcuato– fueron determinantes en su etapa formativa. En una ocasión, cuando estaba en Argentinos Juniors, llegó a presionarlo hasta las lágrimas, y él se sacó la bronca con un gol de gran factura. “Hoy lo entiendo y se lo agradezco –contó hace algunos años–, yo soy lo que soy gracias a él”.
  10. Jovial. ”En las canchas de atrás de mi casa jugábamos todo el día –relató en una entrevista–, apostando un peso para la Coca o la cerveza. A veces había patadas, pero jugábamos sin árbitro. Había patadas, pero la pasábamos bien. Fue mi época más feliz dentro de una cancha”.
  11. Kluivert. Tanto antes como después de su paso por el Barcelona, el delantero holandés fue uno de los más enfáticos en expresar su admiración por él. “Es muy bueno como jugador y como persona, estoy muy feliz de que hayamos jugado juntos”, declaró hace algunos años.
  12. Libertadores. Ganó el torneo más importante del continente en tres ocasiones (2000, 2001 y 2007), todas ellas, con la camiseta de Boca Juniors; Además, hasta la fecha, es el máximo goleador del gigante argentino en la historia del certamen, con 24 tantos en 8 participaciones.
  13. Maradona. Tras su alejamiento de la Selección argentina por diferencias con El Diego, la hinchada de Boca Juniors lo respaldó notoriamente, y pasó a ser considerado el máximo ídolo en la historia del club de La Ribera.
  14. Nene. Para su círculo más íntimo, sigue siendo el que fue antes de convertirse en una estrella mundial. Para su madre, sigue siendo El Nene; para sus amigos, Cabezón, Romy o simplemente Román. “Me gusta estar acá (en Don Torcuato) porque puedo vivir como una persona normal”, confesó poco después de su retiro.
  15. Obsesión. En mayo de este año, el presidente de San José de Oruro sorprendió a propios y extraños al anunciar su intención de contratarlo para que vista la camiseta de la V azulada. El interés fue tan serio, que incluso llegó a reunirse con su representante. Sin embargo, la respuesta fue negativa: el ‘10’ no tiene intención de volver a ponerse los cortos.
  16. Payasito. Uno de los grandes amigos que hizo adentro de las canchas fue Pablo Aimar, con quien compartió plantel en más de una ocasión en la Selección argentina (ganaron dos títulos juveniles). Su relación fue tan estrecha que, antes de retirarse, aspiraban a volver a jugar juntos; pero, al ser ídolos de dos polos opuestos, les resultó imposible.
  17. Queja. “Me hizo correr como un boludo”, dijo después de que Julio César Falcioni –uno de los muchos entrenadores con los que no se llevó bien– lo relegara al banco de suplentes. Un ejemplo que refleja un aspecto clave de su personalidad: siempre fue muy frontal a la hora de brindar declaraciones.
  18. Renuncia. Le dijo adiós a la Selección argentina en dos ocasiones: después del Mundial 2006, porque el peso de sus críticos había incidido en la salud de su madre, y poco después de la asunción de Diego Armando Maradona como entrenador, el 2009, arguyendo que no tenía “los mismos códigos que él”.
  19. Sabina. En 1999 Joaquín Sabina –reconocido artista español– le obsequió su sombrero después de enterarse que había asistido a uno de sus conciertos, y durante varios días, el ‘10’ lo usó a toda hora: en concentraciones, viajes e incluso en la previa de un partido, ante Unión de Santa Fe.
  20. Tévez. Sobre el cierre del año pasado, la partida de Carlos Tévez al fútbol chino fue la bomba del mercado de pases. Al respecto, Riquelme aseguró que él no se hubiera ido a esa liga, y confesó que le gustaría volver ver a El Apache con la camiseta xeneize. ¿Se dará?
  21. United. Cuando aún jugaba en el Villarreal de España, Sir Alex Ferguson lo tentó para que refuerce al Manchester United. ¿Su respuesta? “No, me quedo. Estoy muy cómodo con mis compañeros”. Años después, confesó haberse arrepentido de esa decisión.
  22. Virrey. Con Carlos Bianchi como técnico, Boca conquistó el mundo. Y él, aún con el pasar de los años, no se cansa de elogiarlo. “Para mí, es el entrenador más grande de la historia del fútbol argentino”, tiró hace algunos meses. Juntos, ganaron tres torneos locales, dos Libertadores y una Copa Intercontinental.
  23. Web. A principios de este año, reveló su molestia por las actitudes que han adoptado los futbolistas de hoy en día. “Te meten fotos hasta con el peluquero, pero ninguno ve fútbol. Menos mal que viví la época anterior, porque no sé si podría soportarlo”, expresó en una entrevista.
  24. Xavi. Compartió plantel con el ídolo del Barcelona, y se maneja la posibilidad de que sea uno de los invitados de lujo en su partido de despedida, previsto para jugarse en diciembre. Además, suenan los nombres de Iniesta, Puyol y Forlán.
  25. Yepes. En el marco de la segunda semifinal de la Copa Libertadores del 2000, contra River Plate, inmortalizó un lujo que, hasta ese entonces, nunca se había visto: recibió casi de espaldas al campo rival, bien pegado a una de las líneas de banda, y se sacó de encima a Mario Yepes, uno de los hombres que lo presionaba, con tres pisadas y un caño con media vuelta incluida. Inolvidable.
  26. Zidane. En su último partido oficial a nivel clubes, el ahora técnico del Real Madrid, que había sido reemplazado para recibir la ovación del público Merengue, lo esperó en la entrada a zona de vestuarios para intercambiar camisetas como muestra de respeto y admiración.                                                                                  

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